Informes (ver aquí, en inglés) han confirmado que el 20 de septiembre Nakai, una Orca macho de 11 años de edad, ha sufrido una grave lesión en su barbilla mientras realizaba un show nocturno. A pesar de los reportes según los cuales estaría respondiendo bien a los antibióticos, su estado es incierto en tanto se recupera de esta grave lesión. Cómo se produjo esta herida es materia de especulación: si Nakai se topó accidentalmente o por la fuerza con una pared de la piscina o con una barrera de seguridad metálica o bien si participó de un encuentro agresivo con otra Orca es incierto. SeaWorld dio a conocer un comunicado (sólo disponible en inglés), en el cual se informa que Nakai había “entrado en contacto con una parte de la piscina”. Sin embargo, la gravedad de la herida deja muchas dudas sobre la justificación de SeaWorld.
Otras Orcas han sufrido lesiones (informe en inglés aquí) recientemente en SeaWorld, incluyendo a Ike quien sufrió una grave herida en su mentón/barbilla en julio pasado, en el mismo parque en San Diego. A medida que se suceden las lesiones en Orcas, SeaWorld continúa impugnando la citación legal emitida por la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA, por sus siglas en inglés), que fue confirmada en mayo de este año. Posteriormente, SeaWorld solicitó una apelación oficial a la Administración de Seguridad y a la Comisión de Revisión de Salud que le fue denegada, manteniendo el veredicto original del caso. La última opción de SeaWorld para anular el veredicto es el Tribunal de Apelaciones de EE.UU., donde ha presentado una apelación oficial (sólo disponible en inglés) en su continuo esfuerzo para oponerse a las citaciones de OSHA y requerimientos de mitigación de medidas de seguridad necesarias para proteger a los entrenadores que están en estrecho contacto con las Orcas en los parque marinos de SeaWorld.
Esta herida reciente es un horrible recordatorio de los riesgos inherentes asociados al cautiverio. Como la lista de razones contra el mantenimiento de las Orcas en cautiverio crece y el apoyo a la reclusión continua de Orcas parece estar disminuyendo. Desde WDCS continuamos haciendo un llamado para que esta práctica finalice.
Las necesidades físicas, sociales y mentales de las Orcas no pueden ser atendidas en cautiverio. Por otra parte, la industria de la exhibición pública es una amenaza para las poblaciones silvestres que son objetivo de las operaciones de captura de animales vivos utilizados para abastecer los programas de presentación públicos en todo el mundo.