El gobierno de Estados Unidos aprueba el uso de cañones sónicos submarinos
El gobierno de Estados Unidos ha anunciado la aprobación del uso de cañones sónicos para buscar depósitos de petróleo y gas bajo el lecho oceánico a lo largo de las áreas costeras orientales de Norteamérica.
La aprobación abre las aguas desde Delaware hasta Florida a la exploración por parte de compañías de energía que se preparan para aplicar para obtener concesiones de perforación en 2018. También expone a ballenas, delfines y otras especies silvestres marinas tales como tortugas a niveles extremos de contaminación sonora submarina. Los cañones sónicos pueden disparar sonidos hasta 100 veces más fuertes que el motor de un jet a través del agua y por debajo del lecho oceánico. El nivel de decibeles es más elevado que el límite que causaría serio daño auditivo en humanos; se ha registrado ruido producido por cañones sónicos mediante micrófonos submarinos ubicados a más de 3.700 kilómetros de distancia de la fuente del estallido original.
La contaminación sonora amenaza a poblaciones de ballenas y delfines, interrumpiendo su comportamiento normal, alejándolas de áreas que son importantes para su supervivencia, causándoles lesiones e incluso su muerte. Para ballenas y delfines, el ‘oído’ es tan importante como lo es la ‘vista’ para los humanos; así y todo aún no hay regulaciones internacionales respecto de la contaminación sonora en los mares del mundo.